Las pruebas confirman que la confiabilidad de los componentes se mantiene con el almacenamiento adecuado a largo plazo

Probablemente haya oído hablar de Rochester Electronics y su modelo comercial único que proporciona semiconductores activos y al final de su vida útil que son 100 % autorizados y rastreables. Últimamente, hubo dudas sobre la calidad de las piezas almacenadas "a largo plazo" y si la calidad y la confiabilidad se mantienen después del código de fecha de un producto. Los códigos de fecha de los componentes de semiconductores se originaron en la década de 1940 para mantener el seguimiento en función de las fechas de fabricación o sellado, los procesos y la lista de materiales, y generalmente incluyen una fecha de caducidad de dos a tres años.

Bueno, los proveedores y fabricantes de la industria tenían las mismas dudas. Después de pruebas exhaustivas, puede estar seguro de que estas piezas mantienen su integridad durante años después de su código de fecha cuando se almacenan correctamente.

Una medida aceptada de la calidad y la confiabilidad de los componentes en el campo es la soldabilidad después del almacenamiento a largo plazo. Para determinar la calidad de los componentes de semiconductores envejecidos en aplicaciones del mundo real, Rochester Electronics realizó un análisis de soldabilidad mediante el uso de un montaje en placa estándar de la industria con soldadura en pasta y un proceso de fabricación por reflujo.

En su primer estudio, Rochester utilizó los servicios de una empresa independiente de fabricación electrónica de terceros con experiencia en ensamblaje de PCB para llevar a cabo el proceso de ensamblaje y prueba. La casa de ensamblaje por contrato cuenta con la certificación ISO-9001 y más de 17 años de experiencia. Se seleccionaron componentes con 57 códigos de fecha diferentes de forma aleatoria, con edades que van hasta los 17 años.

En un segundo estudio, los equipos de Calidad y Confiabilidad de Rochester realizaron análisis de la integridad interna del paquete, la calidad de la junta de soldadura de la PCB del componente y los resultados de las pruebas eléctricas en componentes que habían estado almacenados durante un máximo de17 años.

¿Cómo analizaron y probaron estos productos y los factores enumerados anteriormente?

• Imágenes de rayos X e inspección óptica automatizada; para investigar la calidad de las juntas de soldadura.
• Microscopía electrónica de barrido e imágenes de rayos X; para visualizar todas las conexiones internas y descartar daños internos.
• Desencapsulación con ácido y láser; para exponer el molde en el paquete y examinar si hay defectos.
• Sección transversal; tener un análisis desde otro plano de vista.
• Pruebas Funcionales y de Temporización eléctrica; para verificar que el componente cumplió con las especificaciones establecidas por el fabricante según lo establecido en la hoja de datos del dispositivo.

Los hallazgos resumidos concluyeron que todos los componentes mantuvieron la funcionalidad, la integridad y la solidez de las conexiones internas y externas. Para obtener más información sobre las pruebas que realizó Rochester, consulte su blog.

Texas Instruments ha realizado extensas pruebas de confiabilidad del producto que muestran que los componentes y sus activos mantienen su integridad y funcionalidad significativamente más de 21 años cuando se almacenan correctamente. Llevaron a cabo pruebas de ESD, evaluaciones de materiales de embalaje, resistencia al pelado de la cinta, soldabilidad y más. Para ver los detalles descritos, eche un vistazo a sus documentos técnicos sobre almacenamiento a largo plazo y confiabilidad de los componentes.

La investigación diligente de estas empresas ha demostrado que el almacenamiento a largo plazo no necesariamente ocasiona la degradación del producto. Han descubierto que no solo podemos mantener la confianza en los componentes almacenados, sino también en estas empresas. Cada empresa se asegura de que el cliente final reciba solo componentes de la más alta calidad para evitar el tiempo de inactividad y mantener sus aplicaciones en funcionamiento, incluso décadas después de la última fabricación de las piezas. Las restricciones de código de fecha no son el único indicador de la calidad del componente y pueden impedir el uso de componentes perfectamente operativos.